La sirena de Gibraltar, Leandro Pérez

Leandro Pérez regresa con La sirena de Gibraltar: vuelve Juan Torca.

“La muerte es una sirena andaluza con la cola forrada de hormigón”. Pocos comienzos de novelas me han gustado tanto, pocos prometían tanto y pocos lo han cumplido. Y aunque parezca que no se puede empezar más por el principio que escribiendo la primera línea de un libro, sí se puede. Porque esta historia para mí tiene su inicio hace unos dos años, cuando por casualidad descubrí la primera novela de Leandro Pérez, Las cuatro torres, y a su protagonista, Juan Torca. Y qué protagonista. Reconozco que en esta reseña no voy a ser nada objetiva porque lo mío con este personaje ha sido un auténtico flechazo. Si tengo que definirlo de alguna forma, quizá la mejor sea con otro comienzo de otra novela, ya que, salvando las distancias temporales, el ex soldado Torca tiene mucho en común con otro soldado, con uno que “no era el hombre más honesto ni el más piadoso, pero era un hombre valiente”. Espero que a nadie le parezca traído por los pelos porque yo lo he visto claro: este mercenario podría ser un Alatriste moderno, que alquila sus servicios pero tiene moral.

Esta novela es la segunda con el mismo personaje como protagonista, pero os podéis adentrar perfectamente en ella aunque no se haya leído la anterior: son dos historias independientes y en La sirena de Gibraltar no se desvela nada relevante de Las cuatro torres. Aunque yo siempre recomiendo comenzar por el principio. En cualquier caso, pongo a todo el mundo en antecedentes: Juan Torca es un ex militar, mercenario y “solucionador” de aquello que le propongan, le cuadre y le paguen. Vive en Madrid, llegado de Bilbao, del mar de Aral, de zonas a cada cual más conflictiva y, en última instancia, de Burgos, que es su ciudad natal. Viudo y con un hijo intenta hacer y rehacer su vida, para lo cual busca rutinas diurnas que lo ayuden a acabar con la rutina nocturna del insomnio, corre por el Retiro e, incluso, se ilusiona de nuevo con una mujer. Hasta aquí lo que voy a contar de Las cuatro torres. Quizá añado que lo contratan para intentar averiguar quién es el topo del vestuario del Real Madrid en la época de Mourinho como entrenador, pero la acción termina transcurriendo por otros derroteros.

En La sirena de Gibraltar han pasado dos años desde entonces y Torca asiste en primera fila al descubrimiento del cadáver de una mujer en el fondo del Manzanares. Justo frente al estadio Vicente Calderón (guiño futbolero). Sabe quién ha contratado al asesino y se jura a sí mismo que vengará esa muerte, porque fue una que él no quiso llevar a cabo. Un mes antes le habían propuesto acabar con la vida de dos mujeres gibraltareñas, en principio, dos prostitutas, pero la historia quiso que el cadáver que vio cómo sacaban del agua fuera el de Becca Cruz, hermana de las dos gemelas Cruz, las Reinas del Estrecho: Lisa y Maddie, dos nadadoras profesionales que compiten entre ellas por superarse la una a la otra.

A partir de ese momento, Juan Torca sabe que va a haber otra muerte y la querrá evitar a toda costa, porque se siente responsable de lo ocurrido y de lo que puede ocurrir. Para llevar a cabo esta misión autoimpuesta no está solo, cuenta con sus compadres: compañeros y hermanos de batallas que comparten un pasado que aún no se ha develado. No son personajes cualquiera, sus características los hacen únicos y resultan decisivos para el desenlace de la novela.

No quiero contar mucho más porque creo que con estos ingredientes ya se habrá podido comprobar que se ha cocinado una fabulosa novela negra. La acción transcurre entre Madrid y Gibraltar, en tan sólo seis días y resulta frenética. El autor ha sabido manejar sus recursos de un modo magistral, creando suspense, intriga y unas ganas de leer que hacen que las trescientas páginas se devoren. Y, sobre todo, ha creado a Juan Torca, un superviviente que espero que haya venido para quedarse.

¿La recomiendo? Por supuesto. Es más, id a vuestra librería más cercana y conseguid las dos novelas, porque quien lea esta va a querer saber más. Mucho más.

Por cierto, Leandro Pérez, además de periodista y escritor, dirige Zenda, un espacio literario poliédrico en el que cada vez entran más autores. Que nadie se lo pierda.

La sirena de Gibraltar 

Leandro Pérez

Editorial Planeta

346 páginas