Hace unas semanas tuvo lugar en Segovia el Hay Festival y desde hace cuatro años nunca falto a la cita: volver a casa siempre es un placer y si además encuentras un festival de Literatura, mucho mejor. Me parece todo un privilegio que tenga lugar en Segovia, es una ciudad pequeña pero rica en arte y en historia, y también en gente maravillosa: de todo esto puedo dar fe porque es mi cuidad, allí nací y allí pasé los primeros dieciocho años de mi vida. Y siempre la echo de menos. Cada año, la última semana de septiembre, se llena de autores conocidos y reconocidos, se recitan poemas en jardines de ensueño y se susurran versos por la calle. Pero sin lugar a dudas lo que más gente mueve son las charlas con los escritores. Es tal la oferta que resulta imposible acudir a todo, es irremediable seleccionar, y este año lo tuve claro: Dolores Redondo y Fernando Aramburu. Vayamos con la primera.
Encuentro con Dolores Redondo
